lunes, 28 de febrero de 2011

"Tosca", una ópera para tiempos de revolución

Tosca, la famosa ópera de Giacomo Puccini, está ambientada en la Roma papal, contraria a la unificación de Italia en la que Verdi, Garibaldi y muchos patriotas del XIX creían ciegamente. Ahora que soplan vientos de revolución en los países árabes, quizás sea un buen momento para recordar esta ópera en donde queda claro que la lucha por la libertad nunca es gratuita y que, cueste lo que cueste, tiene grandeza.

En Tosca aparece una mujer de gran carácter, Floria Tosca, que será capaz de asesinar al malvado conde Scarpia, jefe de la policía, que quiere aprovecharse de ella prometiéndole que liberará a su amado, el pintor revolucionario Mario Cavaradossi, si ella accede a sus torpes deseos. Tosca finge conceder, pero cuando el sátiro se aproxima lo apuñala y lo mata.

Un drama, en fin, temperamental, sangriento, como todos los románticos, y que acaba con la muerte de los personajes principales, incluidos Tosca y su amado Mario. La música es extraordinaria y la ópera nos regala unas arias memorables, de esas que han sido interpretadas por todos los grandes de la lírica.

La que vamos a reproducir aquí es la celebérrima "Recondita armonia", aria para tenor. Para entenderla bien, pongámonos en situación:

Llega a la iglesia para la que está haciendo una Magdalena el pintor revolucionario Cavaradossi, lo destapa para seguir pintando. El sacristán se sorprende al ver la belleza de la Virgen del cuadro, cuyo rostro no es otro que el de la bella y rubia marquesa Attavanti, que Mario pintó atraído por su belleza. El pintor coge los pinceles, empieza a pintar, compara lo que está haciendo con una miniatura de su amada Tosca que siempre lleva consigo, reflexiona sobre la curiosa armonía, ("Recóndita armonía"), entre los ojos azules y los cabellos rubios de la Attavanti y el cabello oscuro y los ojos negros de su Tosca, actriz y cantante adorada por Roma. Mientras el sacristán gruñe por el carácter mujeriego del pintor, que es, además, un peligroso volteriano enemigo del gobierno papal. He aquí el aria cantada por Plácido Domingo el Magnífico.


Recondita armonia
di bellezze diverse!
È bruna Floria,
l’ardente amante mia,
e te, beltade ignota
cinta di chiome bionde!
Tu azzuro hai l’occhio
Tosca ha l’occhio nero!
L’arte nel suo mistero
le diverse bellezze
insiem confonde:
ma nel ritrar costei
il mio solo pensiero,
ah! il mio sol pensier sei tu!
Tosca sei tu!

Traducción

¡Recóndita armonía
en bellezas diversas!
Es morena Flora,
la ardiente amante mía.
Y tú, beldad ignota,
coronada por rubios cabellos...
¡Tú, con tus ojos azules
y, Tosca, de ojos negros!
El arte, en su misterio,
las diversas bellezas,
mezcla y confunde
mas, en el retrato de ella,
mi único pensamiento, eres tú,
¡Tosca: eres tú!

En el fondo tenemos aquí la vieja discusión : ¿rubias o morenas? Los caballeros las prefieren rubias, dijo el gran Billy Wilder, con aquella esplendorosa Marylin de cine. Tu pupila es azul..., insistió Gustavo Adolfo Bécquer. Pero... Julio Romero de Torres y también Puccini, genios mediterráneos, prefirieron a las morenas. En aquellos momentos de construcción nacional de Italia, afirmar la belleza de la mujer morena era casi un acto de patriotismo.

En fin, polémicas aparte, "Recondita armonia" es un aria bellísima, compleja de ejecución y que exige lo máximo del tenor. Todo un goce para los sentidos.

jueves, 24 de febrero de 2011

Surrealismo: Un cadáver exquisito


El 29 de marzo de 2011 iremos con los alumnos de 2º de Bachillerato a ver el Centro Buñuel de Calanda. Una visita al pueblo natal del genio del cine. Buñuel, Lorca, Dalí, Pepín Bello... Años veinte. Los años dorados de la Residencia de Estudiantes. Decía Carlos Fuentes que el surrealismo había triunfado sobre todo en España. No hay país más surrealista que este. Ni Bréton ni Francia. El surrealismo triunfó en España, sobre todo gracias a Dalí y Buñuel, también a Federico.

El juego más famoso creado por los surrealistas es el del cadáver exquisito. ¿Cómo se juega? Pues aquí está la historia, avempacianos:


"Para este experimento se reúnen varias personas que se van pasando un papel donde todas escriben palabras o esbozan dibujos: el resultado es un conjunto incoherente: una frase o un dibujo que desafían toda lógica. El ejemplo clásico que dio su nombre al juego procede de la primera frase obtenida de ese modo: El cadáver - exquisito - beberá - el vino nuevo" (Yvonne Duplessis, El surrealismo, Barcelona, Oikos-Tau, 1972. Citado en Fernando Muñoz et alia, Buñuel y alrededores, Teruel, Diputación Provincial, pág. 12)
¿Queda claro? Pues ahora, hala, ya sabéis: a jugar al surrealismo. A ver... ¿a quién se le ha quedado un cadáver en la cocina, un burro sobre el piano, una mano llena de hormigas, un marista en bicicleta...?

Pulsa aquí para ver las ilustraciones del libro Buñuel y don Luis, de José Luis Cano:

miércoles, 23 de febrero de 2011

Una de barberos: "El barbero de Sevilla"

El barbero es una figura con gran predicamento en la literatura. Quizá sea por aquello que decía un rey de que confiaba más en su barbero que en sus ministros, pues ponía cada día el real cuello en sus manos. Lo cierto es que tenemos barberos diabólicos, como Sweeney Todd, el barbero diabólico de Fleet Street, en el Londres victoriano (siglo XIX) y barberos risueños, como Fígaro, el barbero de Sevilla, y nuestro zarzuelero barberillo de Lavapiés. Es la cuestión que estos barberos, villanos o liantes, son siempre inteligentes, para ayudar a su señor o para matar a sus enemigos. ¿Será porque el afeitado exige precisión?

Hoy vamos a hablar del barbero más famoso del mundo de la ópera. Rossini, de quien ya hablamos en otras entradas de este blog, es el autor de una de las más improtantes óperas cómicas o bufas del repertorio: Il barbiere di Siviglia, El barbero de Sevilla en español. Con libreto inspirado en la célebre comedia del francés Beaumarchais. Este autor literario fue martillo de nobles, pues a la aristocracia no le gustaba ver en escena cómo el más listo de todos era un siervo, capaz de burlarse de condes, duques y demás ralea, y de salirse finalmente con la suya urdiendo tretas de ingenio sin igual. En fin, Beaumarchais, adorado por el pueblo, anunciaba un cambio en marcha, la caída del Antiguo Régimen y la democratización de la vida social. Beaumarchais, hijo de un relojero, hombre de extraordinario talento, se hizo rico en los negocios, editó las obras completas de Voltaire, triunfó en el teatro... Tras El barbero de Sevilla, escribió una continuación también de gran éxito, Las bodas de Fígaro, que Mozart utilizó para su gran ópera.

Pues bien, a partir de este texto gracioso y subversivo, subtitulado La inútil precaución, heredero de la comicidad del gran Molière, Rossini compuso su ópera, en la que, en efecto, se ve cómo ante el avance imparable del amor -con la alianza imprescindible del ingenio- toda precaución es realmente vana. El argumento es más o menos el que sigue:

El conde Almaviva, que se hace pasar por Lindoro, canta bajo el balcón del doctor Bartolo su serenata dirigida a la bella Rosina, ahijada del médico y tutoranda suya. El alegre barbero Fígaro decide ayudar al conde en su conquista. Pero Bartolo comenta con don Basilio, que es el profesor de música de la joven, que sospecha que Almaviva quiere seducir a su protegida y que, para evitarlo, él mismo se va a casar con ella. Una idea horrible: ¡aquel vejestorio casado con la bella! Las tretas de Fígaro, sus enredos interminables, conducen la obra hasta su happy end: el conde y Rosina se casan y el burlado Bartolo se une a la fiesta final.
En fin, un argumento que no hace sangre, pero sí produce risas y permite pasar un buen rato al aficionado. Una ópera bellísima llena de arias, cavatinas, duetos, quintetos... extraordinarios. Las arias más conocidas son: "Largo al factotum della città", cantada por Fígaro, y "Una voce poco fa", interpretada por Rosina.

Pero calle el presentador y ábrase el telón.


ROSINA
ROSINA

Una voz hace un rato
Una voce poco fa
Aquí en mi corazón sonó,
Qui nel cor mi risuonò,
Mi corazón herido ya está
Il mio cor ferito è già,
Y Lindor era esa la herida.
E Lindor fu che il piagò.
Sí mi amor será
Si, Lindoro mio sarà,
Lo juré, lo ganaré.
Lo giurai, la vincerò.
El tutor se negará
Il tutor ricuserà,
Lo ingeniaré.
Io l'ingegno aguzzerò.
Eventualmente se pegará
Alla fin s'accheterà
Y feliz me quedaré ...
E contenta io resterò...
Sí, el mío será mío;
Si, Lindoro mio sarà;
Lo juré, él lo ganará.
Lo giurai, la vincerà.
Soy dócil
Io sono docile,
Soy respetuosa
Son rispettosa,
Soy obediente
Sono ubbediente,
Dulce, amoroso;
Dolce, amorosa;
Me dejo apoyar
Mi lascio reggere,
Déjame guiarte.
Mi fo guidar.
Pero si me tocan
Ma se mi toccano
¿Dónde está mi debilidad?
Dov'è il mio debole,
Seré una víbora
Sarò una vipera
Y cien trampas
E cento trappole
Antes de rendirse
Prima di cedere
Voy a jugar
Farò giocar.



FÍGARO
La ran la lera, la ran la la.
La ran la lera, la ran la la.
Largo al factotum
della città,
largo!
La ran la, la ran la,
la ran la, la!
Presto a bottega
che l'alba è già, presto!
La ran la, la ran la,
la ran la, la.
Ah, che bel vivere,
che bel piacere,
per un barbiere di qualità,
di qualità!
Ah, bravo, Figaro,
bravo, bravissimo; bravo!
La ran la, la ran la,
la ran la, la.
fortunatissimo per verità!
La ran la, la ran la,
la ran la, la.
Pronto a far tutto,
la notte, il giorno
sempre d'intorno in giro sta.
Miglior cuccagna per un barbiere,
vita più nobile, no, non si dà.
La, la ran la,
la ran la, la ran la.
Rasori e pettini,
lancette e forbici,
al mio comando tutto qui sta.
V'è la risorsa poi del mestiere
colla donnetta, col cavaliere.
Ah, che bel vivere,
che bel piacere
che bel piacere
per un barbiere di qualità,
di qualità
Tutti mi chiedono,
tutti mi vogliono,
donne, ragazzi,
vecchi, fanciulle.
Qua la parrucca...
Presto la barba...
Qua la sanguigna,
presto il biglietto!
Figaro, Figaro, Figaro, Figaro!
Ahimè!, ahimè! Che furia!
Ahimè!
Che folla!
Uno alla volta, per carità!
Figaro! Son qua
Ehi Figaro! Son qua.
Figaro qua, Figaro là,
Figaro qua, Figaro là,
Figaro su, Figaro giù,
Figaro su, Figaro giù!
Pronto prontissimo
son come il fulmine,
sono il factotum della città,
della città!
Ah, bravo Figaro,
bravo, bravissimo!
A te fortuna, a te fortuna,
a te fortuna
non mancherà.
La, la ran la, la ran la, la ran.
A te fortuna, a te fortuna,
a te fortuna
non mancherà!
Sono il factotum de la città!

TRADUCCIÓN AL ESPAÑOL
La ran la lera, la ran la la.
La ran la lera, la ran la la.
¡Dejen paso al factótum
de la ciudad,
dejen paso!
¡La ran la, la ran la,
la ran la, la!
Rápido, a la tienda,
que ya es de día, rápido!
La ran la, la ran la,
la ran la, la.
¡Ah, que vida más hermosa,
qué gran placer,
para un barbero de calidad,
¡de calidad!
¡Ah, bravo, Fígaro, bravo,
bravísimo, bravo!
La ran la, la ran la,
la ran la, la.
¡Afortunadísimo eres en verdad!
La ran la, la ran la,
la ran la, la.
Dispuesto para hacer de todo,
de noche y de día,
va de un lado para otro,
Mejor ganga para un barbero
ni vida más noble, no la hay, no.
La, la ran la,
la ran la, la ran la.
Navajas y peines,
bisturíes y tijeras
a mis órdenes todos están,
tengo recursos, además de oficio,
con la joven, con el caballero.
¡Ah, que vida más hermosa,
qué gran placer,
qué gran placer,
para un barbero de calidad,
de calidad!
Todos me llaman,
me solicitan,
mujeres, muchachos,
viejos y niñas.
Trae la peluca...
rápido, la barba...
Trae las sanguijuelas,
pronto, esta carta.
¡Fígaro, Fígaro, Fígaro, Fígaro!
¡Ay de mí, ay de mí! ¡Qué furia!
¡Ay de mí!
¡Ay, qué multitud!
¡De uno en uno, por caridad!
¡Fígaro! ¡Estoy aquí!
¡Eh, Fígaro! ¡Estoy aquí!
¡Fígaro acá, Fígaro allá,
Fígaro acá, Fígaro allá,
Fígaro arriba, Fígaro abajo,
Fígaro arriba, Fígaro abajo!
Rápido, rapidísimo,
soy como el rayo,
¡soy el factótum de la ciudad,
de la ciudad!
¡Ah, bravo Fígaro,
bravo, bravísimo!
A ti fortuna, a ti fortuna,
a ti fortuna
jamás te faltará.
La, la ran la, la ran la, la ran.
¡A ti fortuna, a ti fortuna,
a ti fortuna
jamás te faltará!
¡Soy el factótum de la ciudad!

jueves, 17 de febrero de 2011

Literatura... ¡y bombones!


¡Lo conseguí! Me ha costado (tiempo... y dinero, o bombones para los alumnos, según se mire). A la tercera va la vencida, o a la cuarta, o a la sexta y, en el fondo, hay cosas que me ocurren por bocazas. Qué bonita es la prudencia y el silencio o, como diría Gracian, el saber callar a tiempo. Pero, claro, quién iba a imaginar que mis alumnos de primero de la ESO iban a conseguirme, de un día para otro, un libro que, desde hacía años, andaba yo buscando: Tanguy de Michel del Castillo, con prólogo de Antonio Muñoz Molina.

Ni librerías de viejo, ni Internet, ni rastrillos, ni viajes a lejanas ciudades ni bares de piscina (sí, ya saben quienes asiduamente lean este blog que uno puede toparse con una edición de La pícara Justina en tan insospechado sitio). Lo más eficaz para conseguir libros inencontrables es utilizar a los alumnos como si de cazarecompensas se tratara.

Hace ya algunos días, durante el feliz transcurso de una clase, relaté a mis alumnos los entresijos del libresco mundo; algunas divertidas aventuras que he vivido para conseguir algunos codiciados ejemplares y, en un arrebato de sinceridad, ofrezco ingente cantidad económica para quien me consiga un ejemplar de Tanguy. ¡Estos chavalines son increíbles! Al día siguiente, zas, el ejemplar aparece. Me buscan frenéticos por las escaleras del instituto y depositan en mis incrédulas manos una bolsita con tan preciado tesoro. "¿Cómo es posible?", balbuceo. "Tan sencillo como mirar en Internet y acudir tras ello a la Librería Central. ¡Había un montón de ejemplares!", me responden con sus cantarinas voces.

¿Reedición? No lo es. Resto de edición, posiblemente, sacada a la luz, que quizás haya estado durmiendo durante años el sueño de los justos en los sótanos del comercio.

Sea como sea, celebramos tan feliz hallazgo con bombones para todos y, tal es la intriga despertada en el grupo que el libro va pasando de mano en mano. Por cierto, ¿quién lo tendrá ahora?

Quienes ya lo han leído me han dicho que les parece triste, pero que les gusta. Bueno, de eso se trata, que las lecturas les gusten, al igual que los bombones.

miércoles, 16 de febrero de 2011

"La Cenerentola" - 2

Buenas y operísticas, avempacianos. En el post anterior os contamos la triste historia de la censura y Ceni (-cienta). Ahora vamos a hablaros de lo importante y no de lo anecdótico, es decir, de la música de Rossini que es lo que realmente ha quedado de esta obra maestra.
  • De La Cenerentola rossiniana ha quedado para la posteridad su magnífica obertura.
  • También la canción de Angelina, alias Ceni, "Una volta c'era un re".
Son igualmente destacables:
  • "Cenerentola vien qua. Cenerentola va' là", donde sus hermanastras casi la vuelven loca haciéndola ir y venir ("dingolondando", que se dice en aragonés),
  • el dúo "Un soave non se che", donde los enamorados definen el amor con la misma frase con que San Juan de la Cruz nos hablaba de la unión mística ("un no se qué que quedan balbuciendo", con la famosa aliteración, ción, ción)
  • el quinteto en Do mayor "Signor, una parola"
  • el divertidísimo "Noi Don Magnifico"
  • el dúo "Zitto, zitto: piano, piano", que Stendhal definió como "la marea saltarina de la fantasía",
  • el aria "Sia qualunque delle figlie", donde a Don Magnifico le da igual con cuál de sus hijas se case el príncipe
  • "Un segreto d'importanza", donde Dandini le confiesa a Don Magnifico que él no es el príncipe, sino que iba disfrazado
  • "Nacqui all afanno... Non più mesta", donde Ceni demuestra su noble corazón, dice que había nacido para la ceniza y ahora se ve en el trono y que perdona a todos los malos, hala, malones, quedáis perdonados...
En fin, toda una joya. El fragmento que os ofrecemos aquí es el célebre sexteto "Questo è un nodo avviluppato", maravilloso para que los estudiantes aprendan qué es la aliteración.

Por cierto, avempacianos, ¿qué es la "alteración" esa? Si lo sabéis, contádnoslo, porfa.

En este sexteto, los cantantes se preguntan algo así como: “¡Qué pasará! Esto es un nudo enmarañado, una trama enrevesada, quien la desanuda más la anuda, mi cabeza da vueltas, da vueltas...” . Los fonemas que más se repiten son la "r", la "l", la "p"...

DON RAMIRO
…..
Siete voi?

CENERENTOLA (osservando il vestito del Prence) Voi Prence siete?

CLORINDA E TISBE (fra loro, attonite) Qual sorpresa!

DANDINI. Il caso è bello!

DON MAGNIFICO (volendo interrompere Ramiro) Ma…

DON RAMIRO. Tacete.

DON MAGNIFICO (Come sopra) Addio cervello. Se…

DON RAMIRO E DANDINI Silenzio.

CLORINDA, TISBE, CENERENTOLA,
DON RAMIRO, DANDINI E DON MAGNIFICO
Che sarà!
Questo è un nodo avviluppato,
Questo è un gruppo rintrecciato.
Chi sviluppa più inviluppa,
Chi più sgruppa, più raggruppa;
Ed intanto la mia testa
Vola, vola e poi s’arresta;
Vo tenton per l’aria oscura,
E comincio a delirar.

Traducción

DON RAMIRO
…..
¿Sois vos?

CENERENTOLA (mirando el traje del Príncipe) ¿Y vos sois príncipe?

TISBE Y CLORINDA (entre ellas, atónitas) ¡Qué sorpresa!

DANDINI. El lance es chistoso.

DON MAGNÍFICO (queriendo interrumpir a Ramiro) Pero…

DON RAMIRO. Callad.

DON MAGNÍFICO (como antes). Adiós, cordura. Sí…

DON RAMIRO Y DANDINI. Silencio.

CLORINDA, TISBE, CENERENTOLA,
DON RAMIRO, DANDINI Y DON MAGNÍFICO
¡Qué pasará!
Esto es un nudo enmarañado,
esto es una trama enrevesada,
quien lo desanuda más lo anuda;
quien lo desenreda más lo enreda;
y entretanto mi cabeza
da vueltas, da vueltas y luego se para,
voy a tientas en la oscuridad,
y comienzo a delirar.

"La Cenerentola": Una cenicienta con censura

Pues sí, ¿a que no podíais imaginar que alguien viera algo pecaminoso en La Cenicienta, el famoso cuento de Charles Perrault con el que han crecido y crecen cientos de niños de todo el mundo? Pues tal cosa le ocurrió nada menos que a Gioacchino Rossini (1792-1868), el famoso compositor italiano, cuando compuso una de sus obras maestras, la ópera mil veces respresentada titulada La Cenerentola, escrita prodigiosamente en tan sólo veinticuatro días cuando tenía 25 años de edad.

El libretista, Jacopo Ferretti (1784-1852), gran poeta, fue marcado de cerca por la censura que le obligó a cambiar algunas escenas de la adaptación teatral.

- ¿Pero cuáles? -estaréis pensando-, ¿en qué escenas podía haber algo pecaminoso en un cuento para niños?

- Ah, hijos míos -responderá el censor-, el pecado se esconde donde menos lo esperamos.

La cosa es que a los censores les pareció muy mal que la pérfida Cenicienta mostrase en escena... ¡nada menos que todo su lindo piececito desnudo, seguido de una libidinosa pantorrilla! ¡Hasta ahí podíamos llegar!

Solución: el bueno del príncipe se quedó compuesto y... sin zapatito de cristal. Cenicienta, tras la conocidísima escena del baile en palacio, se va corriendo dejándole... un casto brazalete, una hermosa pulsera diamantina. Y para encontrarla, el príncipe debería buscar a la doncella que guardase no el otro zapato, claro, sino el brazalete gemelo del primero.

¡Vaya lío! ¿Y cuándo diréis que pasó esto? ¿En la Edad Media? ¿En los tiempos del inquisidor Torquemada?

No, ni mucho menos. La Cenerentola se estrenó en el Teatro Valle de Roma el 25 de enero de 1817. ¡En el siglo XIX!

Naturalmente, el "arreglo" no satisfizo a todo el mundo. Théophile Gautier, ofendido, escribió: "¡Coger un cuento de Perrault, el mejor, y dejar de lado este detalle encantador, el más ingenioso y delicado!"

Stendhal ironizó sobre el particular y dijo que solo perdonaría a Rossini en el caso de que la prima dona del estreno, que fue la cantante Geltrude Righetti-Giorgi (1793-1862), tuviera el brazo más agraciado que el pie. Una bromita que a la diva no le sentó demasiado bien.

En fin, afortunadamente la música de Rossini es tan buena y la ópera tan divertida que acabó conquistando el corazón de los aficionados y hoy es una pieza insustituible del repertorio operístico. Aquí os ofrecemos el aria "Si ritrovarla Io giuro - Pegno adorato e caro", donde el bonachón del príncipe adora al santo, o mejor dicho a la santa, por la peana -es decir, en este caso: por el brazalete- y dice: "Sí, juro que la encontraré - Oh, prenda adorada y querida", refiriéndose al brazalete, claro.

Y es que... ¿Cómo iba a utilizar Rossini algo tan pornográfico como un zapatito de cristal? Aún no habían nacido Freud ni Bettelheim había hecho su clásico estudio sobre el psicoanálisis aplicado a los cuentos de hadas. Los psicoanalistas consideran que el pie desnudo introducido en un zapato son simbolizaciones respectivas del pene y la vagina. Rossini no podía saberlo, claro, pero como gran artista que era, ya se barruntaba él alguna cosica rara en aquello del zapato de cristal. Así que solucionó el problema con un cambiazo: fuera zapato y hola brazalete.

Otros cambios que hizo Rossini son los siguientes: la malvada madrastra es sustituida por un padrastro, Don Magnifico. El Hada madrina es reemplazada por Alidoro, un filósofo y tutor del príncipe.

Pues eso, La Cenerentola. A disfrutarla.



DON RAMIRO (a Dandini)

Sì, ritrovarla io giuro.
Amore, amor mi muove:
Se fosse in grembo a Giove,
Io la ritroverò.
(contempla lo smaniglio)
Pegno adorato e caro
Che mi lusinghi almeno.
Ah come al labbro e al seno,
Come ti stringerò!

CAVALIERI

Oh! qual tumulto ha in seno
Comprenderlo non so.

DON RAMIRO E CAVALIERI

Noi voleremo, domanderemo,
Ricercheremo, ritroveremo.
Dolce speranza, freddo timore
Dentro al mio/suo cuore stanno a pugnar.
Amore, amore m’hai/l’hai da guidar.

Traducción

DON RAMIRO (a Dandini)

Sí, juro encontrarla.
Amor, el amor me mueve:
aunque estuviese en el seno de Júpiter
yo la encontraré.
(contempla el brazalete)
Prenda adorada y querida,
cuánta ilusión me das al menos.
¡Ah, como te estrecharé
contra mis labios y mi pecho!

CABALLEROS

¡Oh! ¡Qué afán salta en su pecho!
No lo puedo comprender.

DON RAMIRO Y CABALLEROS

Volaremos, preguntaremos,
buscaremos, encontraremos.
Dulce esperanza, frío temor
pugnan dentro de mi/su corazón,
amor, amor me ha/le ha de guiar.

martes, 15 de febrero de 2011

RAÚL VUELVE A PONER SU TALENTOSA ZURDA EN ESPAÑA


El delantero español Raúl González Blanco, que actualmente juega en el Schalke 04 alemán tras su conocido paso durante 16 años en el Real Madrid, en el que marcó una época como delantero y capitán, regresa a tierras españolas, concretamente a Valencia, para jugar la Liga de Campeones de la UEFA contra el equipo local, el Valencia CF.
Raúl se encuentra en un buen estado de forma, pese a sus 32 años de edad, y ha marcado 10 goles en la Bundesliga (Liga alemana de fútbol de Primera División) y 2 en la Liga de Campeones. Se muestra como la principal baza ofensiva del equipo alemán, dirigido por el alemán Felix Magath, quien se declaró desde el principio encantado con la llegada del delantero español.
En el Schalke, Raúl porta su conocido dorsal 7, cedido a su llegada por su anterior portador, el chino Hao Jun-Min.
Acompañado en la delantera está por el también ex-jugador del Real Madrid Klaas Jan Huntelaar, y como centrocampista ofensivo, se espera al español José Manuel Jurado, ex-jugador del Atlético de Madrid.
Raúl es conocido por todos. Es hasta la fecha el máximo goleador histórico de la Selección Española de Fútbol, así como del Real Madrid, nada menos que el mejor club de la historia del fútbol, siendo también en este club el jugador con más partidos, más partidos como titular y más minutos de la historia. Conocida es también su celebración de los goles, señalando con los dedos pulgares su número, el 7. Para la Selección, ha jugado en 102 ocasiones, marcando 44 goles.
Esta noche se enfrentarán al Valencia, también en buen estado de forma. En el partido se reencontrará con los ex-miembros de la cantera madridista Roberto Soldado y Juan Manuel Mata, que le conocen bien. Probablemente en la portería valencianista se encuentre otro ex-compañero del 7, César Sánchez. El partido se jugará a las 20:45 horas. ¡Que gane el mejor!

domingo, 13 de febrero de 2011

El idioma español y los tacos

Parece que el hablar mal, usando expresiones malsonantes, es propio de los españoles. Según Sánchez-Albornoz, lo rahez es característico del homo hispanus, desde el más encumbrado al más humilde. Y según cuenta Luis María Ansón, en el prólogo al Sohez  (Carbonell Basset, Delfín, Gran diccionario del argot “El Sohez”, Barcelona, Larousse, 2000. Prólogo de Luis María Ansón.)

“Cuando la hermana del Rey Bermudo II de Galicia era conducida a Córdoba para incorporarse al harén de Almanzor, en calidad de esclava, dijo finamente a los oficiales gallegos que la custodiaban y escoltaban: “Los pueblos deben poner su confianza en las lanzas de sus soldados más que en el coño de sus mujeres”.
(…) El monje Beato del monasterio de Liébana era en el año 785 tan mal hablado como algunos de los camioneros que hacen hoy la ruta del bacalao. En el siglo IX apodaban Boca Mala a un hermano del obispo Fredosindo tan complaciente con Alfonso III. Y los testimonios del lenguaje soez desde la Edad Media hasta nuestros días, lo mismo en los sectores populares que en los dirigentes, son incontables. En España existe una cultura del taco todavía no suficientemente estudiada”.
Por lo visto, el taco es —casi— tan antiguo como el español.

• Comenta tu punto de vista sobre los tacos: ¿son necesarios, inconvenientes, evitables? ¿Somos los españoles más amigos de las palabrotas que otros pueblos?

Poema de amor por San Valentín

Como mañana es San Valentín, he compuesto otro poema, espero que os guste.



Hoy, por San Valentín, hago esto para ti:

El Amor, maravilloso,
o incluso, a veces, doloroso,
sentimiento que descubrí
aquel día en que te conocí.
Sin casi conocerte
fue como un flechazo
pues era un secreto,
el que yo te amara tanto.
Cada día que pasa,
más me muero por verte,
y, aún guardo la esperanza
de saber si tú me quieres.
Y cada vez que no estás,
sufro tu ausencia,
pero cuando al fin regresas
mi corazón, alocado,
palpitando acelera.
En soledad pienso en ti
y en recuerdos que viví
atormentando en mi cabeza
el tiempo que nos queda;
y perderte en un instante
todavía permanece
en un hueco de mi mente,
donde una voz me advierte,
se contradice y me repite
vete, y, no le dejes.
Sin pensar en nada más,
al dormir y despertar,
sueño medio dormida,
en besarte y abrazarte.
En mis sueños apareces
un sinfín de veces,
y, en ellos, más valientes
nos cogemos de la mano
susurrándonos al oído,
Te quiero por siempre amor mío.

Y así acabo este poema,
planteándome un problema,
que sin ti no puedo vivir.

viernes, 11 de febrero de 2011

"Ciudad de los gitanos": Cuando Lorca se une al rock

Un poema de Federico García Lorca, adaptado por Kutxi Romero (poeta y cantante de Marea) para convertirlo en una canción del rock español. Habla de las represiones ejercidas por la Guardia Civil tras la sublevación militar de la Guerra Civil española.


Los caballos negros son.
Las herraduras son negras.
Sobre las capas relucen
manchas de tinta y de cera.
Tienen, por eso no lloran,
de plomo las calaveras.
Con el alma de charol
vienen por la carretera.

¡Oh ciudad de los gitanos!
¿Quién te vio y no te recuerda?
Ciudad de dolor y almizcle
con las torres de canela.
¡Oh ciudad de los gitanos!
¿Quién te vio y no te recuerda?
Apaga tus verdes luces
que viene la benemérita.

La ciudad, libre de miedo,
multiplicaba sus puertas.
Cuarenta guardias civiles
entran a saco por ellas.
Los relojes se pararon
y el coñac de las botellas
se disfrazó de noviembre
para no infundir sospechas.

Por las calles de penumbra,
huyen las gitanas viejas
con los caballos dormidos
y las orzas de monedas.
Por las calles empinadas
suben las capas siniestras,
dejando detrás, fugaces,
remolinos de tijeras.

¡Oh ciudad de los gitanos!
¿Quién te vio y no te recuerda?
Dejadla lejos del mar
sin peines para sus crenchas.
¡Oh ciudad de los gitanos!
¿Quién te vio y no te recuerda?
Que te busquen en mi frente.
Juego de luna y arena.

Rosa la de los Camborios,
gime sentada en su puerta
con sus dos pechos cortados
puestos en una bandeja.
Pero la Guardia Civil
avanza sembrando hogueras,
donde joven y desnuda
la imaginación se quema.

¡Oh ciudad de los gitanos!
¿Quién te vio y no te recuerda?
Que te busquen en mi frente.
Juego de luna y arena.
¡Oh ciudad de los gitanos!
La Guardia Civil se aleja
por un túnel de silencio
mientras las llamas te cercan.

jueves, 10 de febrero de 2011

El hombre de la Mancha - 2

Seguimos con nuestros "posts" sobre Don Quijote. La inmortal obra cervantina ha inspirado a pintores, escritores, músicos... En la entrada anterior, hablamos del Don Quichotte de Massenet. Ahora vamos a hablaros de El hombre de la Mancha (Man of la Mancha), el famoso musical de Broadway.

El hombre de la Mancha  es del año 1965. Cuenta la historia de Don Quijote de la Mancha como una obra de teatro dentro de una obra de teatro (metateatro), representada por Miguel de Cervantes y sus compañeros de prisión mientras espera una audiencia con la Inquisición española. Está basada en el libro del mismo nombre de Dale Wasserman, las letras de las canciones son de Joe Darion, y la música de Mitch Leigh. Richard Kiley ganó un Premio Tony por su representación de Cervantes/Quixote en Broadway. En 1992 se reestrenó el musical en Broadway, con Raúl Juliá en el papel protagonista. La canción El sueño imposible fue especialmente popular y hay versiones cantadas por Elvis Presley, Plácido Domingo, Tom Jones, Andy Williams, Frank Sinatra... He aquí la letra:

DON QUIJOTE
Soñar lo imposible soñar.
Vencer al invicto rival
Sufrir el dolor insufrible,
Morir por un noble ideal
Saber enmendar el error.
Amar con pureza y bondad.
Querer. En un sueño imposible,
Con fe una estrella alcanzar.
Ese es mi afán,
Y lo he de lograr,
No importa el esfuerzo
No importa el lugar
Saldré a combatir y mi lema será
Defender la virtud aunque deba
El infierno pisar.
Porque sé que si logro ser fiel
A tan noble ideal,
Dormirá mi alma en paz al llegar
El instante final.
Y será este, mundo mejor,
Porque yo, sin rendirme jamas,
Busque, en mi sueño imposible,
Poder una estrella alcanzar

(Pulsa aquí para ver el libreto completo: El hombre de la Mancha)

Como el musical tuvo tanto éxito, se hizo una película, dirigida por Arthur Hiller, en 1972 con Peter O'Toole y Sophia Loren.

El argumento tiene importantes diferencias con la obra original cervantina. Posiblemente la principal es que Aldonza Lorenzo, Dulcinea del Toboso para don Quijote, de ser un personaje que sólo es mencionado en el libro, se convierte en una de las protagonistas del musical.

El éxito de la representación hizo que en 1966 el cantante belga Jacques Brel solicitara los derechos para llevar a cabo una versión en francés, que se representó en Bruselas y París entre 1968 y 1969 y en la que él mismo ejerció de protagonista.

También se adaptó al español y se representó en 1968 con Claudio Brook como Don Quijote y Nati Mistral como Dulcinea. En 1997, se recuperó y representó en Madrid con José Sacristán en el papel de Don Quijote y Paloma San Basilio en el de Dulcinea.

Vamos a copiar aquí algunas canciones de Man of la Mancha. Primero, en español (Paloma San Basilio), después la película, luego las versiones de varios cantantes y, por último... ¡Karaoke!











Y por si te apetece cantar... LYRICS




4º MÍSTICO DE E.S.O.

FIN DE CURSO

"Quedéme y olvideme,
el rostro recliné sobre Aprobado
cesó todo y quedeme
las notas extasiado
mirándolas flipado."

(De Cuarto místico de E.S.O. Apócrifo. Atrib. a Juanito de la Cruz)

miércoles, 9 de febrero de 2011

El hombre de la Mancha

En el arte hay temas universales que van pasando de la literatura a la música, la pintura, la escultura... Eso ocurre con mitos de la literatura universal como Don Quijote. El compositor francés Jules Massenet compuso una ópera titulada Don Quichotte, bastante diferente del original cervantino, pues el Caballero de la Triste Figura parecía un Jesucristo y Dulcinea aparecía en escena convertida en una rompecorazones que disfrutaba haciendo sufrir al buen hidalgo.

El aria más famosa de esta ópera, que pertenece al repertorio de las más representadas en el mundo de hoy, es el aria de Sancho Panza para bajo-barítono al final del libreto, recriminando a la gente que se ría de aquel pobre soñador cuyo delito consistía en soñar con la justicia y con un mundo mejor donde los fuertes ayudan a los débiles. Aquí tenéis el vídeo tomado de YouTube:


Letra en francés
Riez, allez, riez du pauvre idéologue
Qui passe dans son rêve et vous parle d'églogue,
tendrement ému
D'amour et de bonté comme autrefois Jésus!
violement
Moquez-vous sans pitié de ses bas décousus,
De son pourpoint usé, de ses chausses boueuses,
flétrissant la foule qui recule devant lui
Vous… bas fripons, courtisans, gueuses,
qui devriez tomber aux pieds
De l'être saint dont vous riez?
à Don Quichotte, avec enthousiasme
Viens, mon grand!
Recommençons les belles chevauchées!
Viens, mon grand, viens!
Fonçons sur toute lâcheté…
Et donnons au malheur le pain de la bonté!
Viens, mon grand!
Viens! Viens!
(Il embrasse son vieil ami qui lui tend les bras.
Rideau.)

Sancho, que ve como su señor está abatido por la derrota, viene a decir algo así como: ¡Hala, reíd, reíos del pobre ideólogo que en su sueño nos habla de églogas, de amor y de bondad como antaño Jesús! ¡Burlaos de él sin piedad, de sus botas llenas de barro, vosotros, bribones, cortesanos, malditos, que deberíais postraros a sus pies! ¿De un santo os reís? ¡Ah, mi gran don Quijote, ven, recomencemos nuestras cabalgadas, ven, viejo amigo y compartamos hasta el fin el pan de la bondad, ven, ven...!

lunes, 7 de febrero de 2011

De amores, filtros y bebedizos: L'elisir d'amore, de Donizetti

¡Ah, il cuore! Ahora que se acerca san Valentín, nada mejor que hablar del Amor, ese angelillo travieso que lanza dardos a quien no quieres y a quien quieres no le hace ná. Pero para paliar esos descuidos de los dardos de Cupido, se inventaron los bebedizos, los filtros amorosos, los conjuros. Nuestra Celestina, por ejemplo, medio bruja, medio alcahueta, para convencer a Melibea de que amase a Calisto conjuró nada menos que al dios Plutón. Tristán e Iseo se amaron irremediablmente por la acción de un filtro amoroso. (Y por cierto, sobre esta pareja hizo Richard Wagner una de sus mejores obras, Tristán e Isolda).

En la ópera, la obra más famosa del repertorio relacionada con bebedizos de amor es, precisamente, L'elisir de amore, con música de Gaetano Donizetti y libreto de Felice Romani, basado en el libro Le philetre de Eugène Scribe. Fue estrenada en Milán en 1832. Junto a El barbero de Sevilla y Las bodas de Fígaro, es la ópera cómica más conocida y representada del repertorio. Posee hermosas melodías, entre las que destaca una de las arias para tenor más famosas de todos los tiempos, "Una furtiva lagrima".

El argumento es más o menos como sigue:

En una aldea de Italia, a finales del siglo XVIII, el joven Nemorino está enamorado de Adina, que le muestra su indiferencia y le da celos. Desesperado, compra el misterioso elixir del doctor Dulcamara, un charlatán que le asegura que despertará una pasión incontenible en la chica. Se trata, en realidad, de vino de Burdeos, con el que el chico se emborracha, lo que irrita más a Adina que, despechada, anuncia su casamiento con Belcore, un sargento presuntuoso (el miles gloriosus o soldado fanfarrón de las comedias latinas) que ha llegado al barrio con su regimiento.

Nemorino pide a Dulcamara más elixir para conquistar a Adina. Como no tiene dinero, se alista como soldado, con lo que gana al instante veinte escudos. Las chicas del pueblo se enteran de que ha heredado una fortuna de su fallecido tío y lo persiguen, él lo atribuye a la eficacia del elixir. Adina, que nada sabe, al verlo rodeado de mujeres, se siente descorazonada, cree que él la ha olvidado. Dulcamara le explica que Nemorino ha vendido su libertad y se ha hecho soldado por ella. Adina reflexiona sobre su crueldad y comprende cuánto le ama. Todo acaba bien y Dulcamara declara que todo se debe a su prodigiosa poción, que todos quieren comprar.

Como se ve, una obra simpática y feliz. Aquí ofrecemos dos arias: la primera, cuando llega el doctor Dulcamara rodeado de lujo y poderío. Los campesinos creen que llega algún poderoso, por lo menos un duque. El doctor, en este caso un magnífico Simón Orfila, canta su famoso "Udite, udite, o rustici" y cuenta lo magníficos que son sus (falsos) brebajes. En fin, un brillante charlatán:


Letra en italiano
Udite, udite, o rustici
attenti non fiatate.
Io già suppongo e immagino
che al par di me sappiate
ch'io sono quel gran medico,
dottore enciclopedico
chiamato Dulcamara,
la cui virtù preclara
e i portenti infiniti
son noti in tutto il mondo... e in altri siti.
Benefattor degli uomini,
riparator dei mali,
in pochi giorni io sgombero
io spazzo gli spedali,
e la salute a vendere
per tutto il mondo io vo.
Compratela, compratela,
per poco io ve la do.
È questo l'odontalgico
mirabile liquore,
dei topi e delle cimici
possente distruttore,
i cui certificati
autentici, bollati
toccar vedere e leggere
a ciaschedun farò.
Per questo mio specifico,
simpatico mirifico,
un uom, settuagenario
e valetudinario,
nonno di dieci bamboli
ancora diventò.
Per questo Tocca e sana
in breve settimana
più d'un afflitto giovine
di piangere cessò.
O voi, matrone rigide,
ringiovanir bramate?
Le vostre rughe incomode
con esso cancellate.
Volete voi, donzelle,
ben liscia aver la pelle?
Voi, giovani galanti,
per sempre avere amanti?
Comprate il mio specifico,
per poco io ve lo do.
Ei move i paralitici,
spedisce gli apopletici,
gli asmatici, gli asfitici,
gl'isterici, i diabetici,
guarisce timpanitidi,
e scrofole e rachitidi,
e fino il mal di fegato,
che in moda diventò.
Comprate il mio specifico,
per poco io ve lo do.
L'ho portato per la posta
da lontano mille miglia
mi direte: quanto costa?
quanto vale la bottiglia?
Cento scudi?... Trenta?... Venti?
No... nessuno si sgomenti.
Per provarvi il mio contento
di sì amico accoglimento,
io vi voglio, o buona gente,
uno scudo regalar.
Ecco qua: così stupendo,
sì balsamico elisire
tutta Europa sa ch'io vendo
niente men di dieci lire:
ma siccome è pur palese
ch'io son nato nel paese,
per tre lire a voi lo cedo,
sol tre lire a voi richiedo:
così chiaro è come il sole,
che a ciascuno, che lo vuole,

uno scudo bello e netto
in saccoccia io faccio entrar.
Ah! di patria il dolce affetto
gran miracoli può far.

La segunda, es el aria de tenor "Una furtiva lagrima". Nemorino se da cuenta de que Adina, después de haberlo visto rodeado de lindas jovencitas, no ha podido evitar una furtiva lágrima. Entonces, su corazón se esperanza y sueña con conseguir a su amada, la única mujer que de verdad le interesa.

No os la perdáis, avempacianos. ¡Es tan intensa, sniff, sniff, buaaa, povretta Adina!



Letra en italiano
Una furtiva lagrima
negli occhi suoi spuntò:
Quelle festose giovani
invidiar sembrò.
Che più cercando io vò?
Che più cercando io vò?
M'ama! Sì, m'ama, lo vedo. Lo vedo.
Un solo istante i palpiti
del suo bel cor sentir!
I miei sospir, confondere
per poco a' suoi sospir!
I palpiti, i palpiti sentir,
confondere i miei coi suoi sospir...
Cielo! Sì, può morir!
Di più non chiedo, non chiedo.
Ah, cielo! Sì, può! Sì, può morir!
Di più non chiedo, non chiedo.
Sì, può morir! Sì, può morir d'amor.


Traducción al castellano
Una furtiva lágrima
en sus ojos apareció:
a las festivas jóvenes
envidiar pareció.
¿Qué más voy yo buscando?
¿Qué más voy yo buscando?
¡Me ama! Sí, me ama, lo veo. Lo veo
¡Por un instante el pálpito
de su corazón escuchar!
¡Mis suspiros confundir
con sus suspiros!
El pálpito, el pálpito de su corazón sentir
y confundir mis suspiros con los suyos...
¡Cielos! ¡Sí, podría morir!
Pedir más no puedo, no puedo,
¡Cielos! ¡Sí, podría morir!
Pedir más no puedo, no puedo.
¡Sí, podría morir! ¡Sí, podría morir de amor!

Enlaces:

domingo, 6 de febrero de 2011

PEDRO LAÍN ENTRALGO Y EL ENSAYO ESPAÑOL

He leído estos días el libro de Agustín Albarracín Pedro Laín, historia de una utopía (Madrid, Espasa-Calpe, 1994) y encuentro en él cosas muy interesantes. Por ejemplo, en las pp. 153-154, don Pedro teoriza sobre qué sea el ensayo:

«Para algunos, el ensayo es una especie de "género chico" de la literatura. Yo, siguiendo a Marañón, pienso que lo más serio que hacemos los hombres es ensayar y ensayar. Pero también pienso que el cultivo del ensayo debe llevar dentro de sí, en una u otra medida, la aspiración al sistema. Sí; si el ensayo es, como he dicho en alguna ocasión, una "sugestiva teoría de urgencia", el ensayista tiene la obligación de hacer alguna vez explícitas, ya sin urgencia, las razones de esa sugestión y esa teoría. Como escritor que jamás acaba de poseer su oficio, he compuesto una y otra vez ensayos o ensayuelos sobre las personas, las obras y las cosas que la vida ha ido poniendo junto a mí. He dicho en alguna ocasión que estoy condenado a ser ensayista, porque no acierto a evitar que a mi inteligencia la seduzcan temas muy distintos y porque siempre termino mis ensayos, sea cualquiera su extensión, pensando que debería componerlos de nuevo. (...) ¿Palabras vanas y fugaces, las muchas que en el ejercicio de mi oficio he escrito o pronunciado? Por su valor, casi siempre; aunque me halle bastante lejos de ser un beato de la humildad, conozco bien el radio de mis propios límites. Pero si es cierto que "el amor nunca se extingue", como enseña San Pablo, algo quedará de ellas, porque siempre o casi siempre ha sido una forma de amor —a la verdad, a la dignidad de ser hombre, a mi país, a una actividad humana, a tal o cual persona, próxima a mí o de mí distante— lo que en definitiva las ha determinado.»


¿Bonito, verdad? Destaco algunas ideas que pueden ser útiles para el comentario de texto, sobre todo en 2º de Bachillerato (PAU):

  • el ensayo, si se hace con seriedad, no es un "género chico", no son palabras de urgencia poco reflexivas, escritas sin pensar, sino que puede tener un gran valor intelectual;
  • el ensayo remite a una teoría más amplia, en ese sentido es como el artículo periodístico (que se llama así precisamente porque está "articulado" con un todo mayor, que sería la teoría general, la preceptiva, la ideología con sus principios y sus prejuicios, desde la que escribimos y opinamos);
  • el método del ensayo y el error es el que ha hecho progresar a la ciencia y el fundamento mismo del aprendizaje y la educación. Esto da un aire de provisionalidad a todas las afirmaciones. Conviene que haya herejes, que decía San Pablo. No es bueno el dogmatismo, sí el falsacionismo popperiano. Ensayar y ensayar es el camino para el éxito. ¡Ánimo, pues, avempacianos, y a ello!
  • Laín, cristiano profundo, siempre defendió que el motor del mundo era el amor. Es el amor al prójimo y a la verdad el que ha impulsado, también, a la ciencia y el que motiva la escritura y el ensayo. Es por amor por lo que el científico, el inventor, el escritor... hacen su obra.
Y ya que se acerca san Valentín, aquí lo dejo, con esta imagen amorosa y con una pregunta: ¿Existe un solo tipo de amor?

¿Qué creéis, avempacianos? Escribid y contádnoslo, porfa.


viernes, 4 de febrero de 2011

UNA "IDEÍCA" SOBRE EL HOMBRE Y LA GRAMÁTICA

Esta "ideíca", que digo imitando la palabra que gustaba de usar el sabio Ramón y Cajal, la tomo de otro sabio aragonés: Pedro Laín Entralgo. En el libro de Agustín Albarracín, Pedro Laín, historia de una utopía (Madrid, Espasa-Calpe, 1994), habla don Pedro con su discípulo y biógrafo y le dice que es característico del hombre su sustantividad y su vocación para la acción. Es decir, el hombre es constitutivamente sujeto y predicado, nombre y verbo. Pero, además, el hombre es adverbialidad, circunstancialidad. Somos "adverbialmente situados", en un hic et nunc, en un aquí, así y ahora.

Como diría Ortega, "Yo soy yo y mi circunstancia". Esto hace que el hombre sea esencialmente biográfico y que, para entenderlo en su integralidad, haya que comprenderlo desde una perspectiva histórica, generacional.

La historia, la biografía no son, pues, un lujo erudito o un entretenimiento inane de personas más o menos ociosas, sino que solo en ellas y desde ellas podemos comprender a las naciones e individuos que las componen. He aquí por qué es tan importante situar a los autores dentro de su generación, pues los nacidos en torno a las mismas fechas han sido marcados, condicionados, por los mismos sucesos históricos, las mismas mentalidades, ideologías, prejuicios...

En definitiva, lo histórico es una categoría fundamental para la correcta intelección de lo social y lo antropológico.

Y por supuesto, no es posible entender al hombre sin gramática, un sujeto que quiere ser predicado, adverbialmente situado en el mundo y desesperantemente desparramado sobre cosas adjetivas que carecen totalmente de interés para el meollo significativo de la oración principal: la sola, pura e intensa vida.

Como diría don Antonio Machado, a veces confundimos las voces con los ecos.

Y la gramática, con la gramática parda, añadimos nosotros.