viernes, 2 de marzo de 2012

UN GRIEGO RESPONDE A UN ALEMÁN

Vivimos tiempos de crisis. He aquí unas cartas cruzadas, la primera de un alemán dirigida a los griegos, la segunda la respuesta de un griego al autor alemán. Son dos puntos de vista sobre la crisis de la Eurozona. ¿Cuál te parece más acertado?

INTERCAMBIO DE CARTAS ABIERTAS EN EL PERIÓDICO ALEMÁN “STERN” 
  
Hace unos meses, apareció una Carta Abierta, titulada “Queridos griegos”, escrita por un ciudadano alemán, Walter Wuellenweber: 
  
"Queridos griegos:
  
Desde 1981 pertenecemos a la misma familia. 
  
Nosotros, los alemanes, hemos aportado como ningún otro país al fondo común cerca de 200 mil millones de  euros, mientras que Grecia ha recibido cerca de 100 mil millones de esa suma, o sea, la mayor suma per cápita que ningún otro pueblo de la UE. Nunca ningún pueblo ayudó hasta ahora voluntariamente hasta este grado a otro y por tanto tiempo. 
  
Son ustedes sinceramente los amigos más caros que tenemos. El caso es que no solo ustedes se engañan a sí mismos, sino que también nos engañan a nosotros. En esencia, ustedes nunca demostraron ser merecedores de nuestro euro. Desde la incorporación a la moneda europea de Grecia nunca lograron hasta ahora cumplir con los criterios de estabilidad. Dentro de UE son el pueblo que gasta las mayores sumas en bienes de consumo. Ustedes descubrieron la Democracia , entonces deben conocer que se gobierna a través de la voluntad del pueblo, quien finalmente tiene la responsabilidad. No digan por tanto que solo los políticos son responsables del desastre. 
  
Nadie los obligó a evadir 
impuestos durante años, a oponerse a cada política coherente para reducir el gasto público y nadie los obligó a elegir los gobernantes que han tenido y tienen ahora. Los griegos son quienes nos han mostrado el camino de la Democracia , de la Filosofía y de los primeros conocimientos de Economía Nacional. Pero ahora nos muestran un camino equivocado. Y donde ustedes han llegado, no va más allá!"
  
A la semana siguiente, STERN publica la Carta Abierta de un griego, dirigida a Wuellenweber:
  
"Querido Walter: 
  
Me llamo Georgios Psomás. Soy funcionario público y no “empleado público” como despectivamente, como insulto, se refieren a nosotros mis compatriotas y tus compatriotas. Mi sueldo es de 1.000 euros por mes, ¿eh?, no vayas a pensar que son por día, como te quieren hacer creer en tu país. Fíjate que gano una cifra que ni siquiera es inferior en 1.000 euros a la tuya, que es por varios miles. 
  
Desde 1981, tienes razón pertenecemos a la misma familia. Solo que nosotros os hemos concedido en exclusividad a vosotros un montón de privilegios, como ser los principales proveedores del pueblo griego en tecnología, armas, infraestructura (2 autopistas y dos grandes aeropuertos  internacionales), telecomunicaciones, productos de consumo, autos, etc. Si me olvido de algo, perdóname. Te señalo que dentro de la UE somos los mayores importadores de productos de consumo que elaboran las fábricas alemanas. 
  
La verdad es que no hacemos responsables solo a nuestros políticos por el desastre de Grecia. También contribuyeron mucho algunas grandes empresas alemanas, las que pagaron enormes cifras a nuestros políticos para asegurarse los contratos, para vendernos de todo, hasta unos cuantos submarinos fuera de servicio, que puestos en el mar quedan tumbados de costado. 
  
Yo sé que aún no das crédito a lo que escribo. Ten paciencia, espera, lee toda la carta y si no llego a convencerte, te autorizo a que me eches de la Eurozona, ese lugar de la VERDAD , la PROSPERIDAD, la JUSTICIA y lo CORRECTO. 
  
Walter, estimado Walter, pasó más de medio siglo desde que la Segunda Guerra Mundial terminó, es decir,  MÁS DE 50 AÑOS desde la época en que Alemania debería haber saldado sus obligaciones con Grecia. Estas deudas, QUE SOLO ALEMANIA hasta ahora se resiste a saldar con Grecia (ya que Bulgaria y Rumania han cumplido en pagarlas), consisten en : 
  
1. Una deuda de 80.000.000 de marcos alemanes por indemnizaciones, que quedó impagada desde la Primera Guerra Mundial.

2. Deudas por diferencias de clearing, en el período entreguerras, que asciende hoy a 593.873.000 dólares USA.

3. Los préstamos obligados que contrajo el III Reich a nombre de Grecia durante la ocupación alemana, que ascendieron en 3,5 mil millones de dólares durante todo el período de ocupación.

4. Las reparaciones que debe Alemania a Grecia por las confiscaciones, persecuciones, ejecuciones y destrucciones de pueblos enteros, rutas, puentes, líneas ferroviarias, puertos, que produjo el III Reich, y que según lo dictaminado por los tribunales aliados, asciende a 7,1 mil millones de dólares, de los cuales Grecia no vio un billete aún.

5. Las inmensurables reparaciones de Alemania por la muerte de 1.125.960 griegos (38.960 ejecutados, 12.000 muertos como daño colateral, 70.000 muertos en combate, 105.000 muertos en los campos de concentración en Alemania, 600.000 muertos de hambre, etc., etc.).

6. La tremenda e inmensurable ofensa moral ocasionada al pueblo griego y a los ideales humanísticos de la cultura griega. 
  
Sé que no te debe gustar para nada lo que te escribo. Lo lamento. Pero más me molesta lo que Alemania quiere hacer conmigo y con mis compatriotas. Amigazo Walter, en Grecia operan 130 empresas alemanas, dentro de las cuales se incluyen todos los colosos de la industria de tu país, que tienen ganancias anuales de 6,5 mil millones de euros. 
  
Muy pronto, si la cosa sigue así, lamentablemente no podré comprar más productos alemanes, porque cada vez tengo menos dinero. Yo y mis compatriotas crecimos siempre con privaciones, por lo cual lo podremos aguantar, no te preocupes. Podemos vivir sin BMW, sin Mercedes, sin Opel, sin Skoda. 
  
Dejaremos de comprar productos de Lidl, de Praktiker, de IKEA. Pero vosotros, Walter, ¿cómo os las vais a arreglar con los desempleados que dejará esta situación, tal vez hasta tengáis que  bajar vuestro estándar de vida, vuestros autos lujosos, vuestras vacaciones al exterior, vuestras excursiones sexuales a Tailandia.
  
Vosotros, alemanes, suecos, holandeses y restantes “compatriotas” de la Eurozona,  pretendéis que nos vayamos de Europa, de la Eurozona y no sé de dónde más. 
  
Creo firmemente que debemos hacerlo para salvarnos de una Unión que es una banda de especuladores financieros, un equipo en el cual solo jugamos si consumimos los productos que nos ofrecéis: préstamos, bienes industriales, bienes de consumo, obras faraónicas, etc. 
  
Y finalmente Walter, debemos “arreglar” otro tema importante, ya que tú también eres deudor de Grecia:


¡EXIGIMOS QUE NOS DEVUELVAN LA CIVILIZACIÓN QUE NOS ROBARON!
Queremos que vuelvan a Grecia las inmortales obras de nuestros antepasados, que guardan en los museos de Berlín, Munich, París, Roma y Londres.”


¡Y EXIJIMOS QUE SEA AHORA!

Ya que si me muero de hambre, me quiero morir al lado de las obras de mis antepasados 
  
Cordialmente, Georgios Psomás".

2 comentarios:

  1. La carta de Georgios es tan apabullantemente cruda, tan real, y la de Walter es tan tristemente germana, tan "económicamente correcta", que está todo dicho.
    Añadir, tan sólo, que España olvida que su vecino es Georgios, no Walter.

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  2. Desgraciadamente, así es: estamos mucho más cerca de Grecia que de Alemania. Si Europa no es algo más que un mercado de 300 millones de consumidores donde se llevan el gato al agua solo los más fuertes, el proyecto de integración transnacional fracasará. Nos hace falta una idea social de Europa que pueda ser alternativa al capitalismo salvaje de otros lugares.
    Gracias por tu comentario, Miguel Ángel.

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