martes, 27 de noviembre de 2018

973 mujeres que no se comportaron como debían


Se habla de violencia de género refiriéndose a cualquier acto violento o agresión, basados en una situación de desigualdad en el marco de un sistema de relaciones de dominación de los hombres sobre las mujeres que tenga o pueda tener como consecuencia un daño físico, sexual o psicológico, incluidas las amenazas de tales actos y la coacción o privación arbitraria de la libertad, tanto si ocurren en el ámbito público como en la vida familiar o personal. 

Pero, ¿cual es la cruda realidad? ¿Qué es lo que realmente se sufre de toda esa palabrería?
Pues bien, como todos sabemos la violencia de género es algo espeluznante que, por desgracia, existe desde tiempos inmemoriales. Sí, existe, habéis leído bien. Y lo peor no es que se dieran casos en un tiempo pasado, sino que esto se presencia hoy en día, en algunos casos, con total normalidad.

En España, se han registrado 44 mujeres asesinadas en lo que llevamos de este año 2018 y un total de 973 desde 2003, que fue cuando empezaron a contabilizarse las víctimas. Del mismo modo, se han registrado 27 menores fallecidos por esta misma causa desde 2013.




Como bien sabéis el día en el que se conmemora a todas estas víctimas es el 25 de noviembre, y como toda fecha señalada, esconde una historia.

El 25 de noviembre de 1960, las hermanas Mirabal (Patria, Minerva y María Teresa) fueron asesinadas por el régimen del dictador Rafael Leónidas Trujillo en la República Dominicana.



Desde entonces, cada 25 de noviembre se las recuerda, a ellas y a todas las que ya no están.
Esta convocatoria fue iniciada por el movimiento feminista de Latinoamérica en 1981 y reconocida por la ONU en 1999.


Muchas son las maneras mediante las cuales se expresa la reivindicación ante tal injusticia. En muchos casos, la música es usada para transmitir ese dolor y ponerse en la piel de estas mujeres que ya no tienen voz. 
Así pues, me gustaría compartir un vídeo en el que se muestra la violencia conyugal en forma de baile. En él, podemos observar el completo control del hombre sobre la mujer y la angustia inhumana que eso acarrea.





No te rindas, por favor no cedas,
Aunque el frío queme,
Aunque el miedo muerda,
Aunque el sol se esconda,
Y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma
Aún hay vida en tus sueños.

Mario Benedetti 




FUENTES CONSULTADAS:

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