A veces...
nada es como pensamos,
nos sumimos en un mar
en el que estamos rodeados,
de todo el conocimiento
que en un momento dado,
hemos captado.
Nos vemos atrapados,
en un sitio sin salida
en un umbral sin luz, ni guía,
como nuestra propia sombra
que nos persigue en la luz
del largo día.
Agobiados nos sentimos,
por ser algo diferentes
cuando en esta sociedad,
es algo de admirar
el ser capaz de pensar,
en uno mismo,
y jamás en los demás.
Preocuparnos no debemos,
pues el camino está pactado
y nuestro viaje sellado,
la vida es un sinfín
de ocasiones y semejantes,
que al poco que nos demos cuenta
se vuelven irrelevantes.
Me gusta, te explicas bien, es profundo y tú eres de esas personas que tienes mucho que aportar a los demás. Muy bien, Vanessa
ResponderEliminarMe encanta como escribes, reflejas la realidad.
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